El siguiente artículo contiene spoilers de Borderlands 3.
No sabía si los fans iban a amar o a odiar a Typhon DeLeon. Al fin y al cabo, los buscacámaras son todo un mito en el universo de Borderlands. Mucha gente quiere llegar a ser uno de ellos. Los hay de todos los tipos, claro, pero lo que comparten todos ellos es que son unos verdaderos cabrones, cosa que Typhon DeLeon no aparenta cuando lo ves por primera vez (a diferencia de los carteles suyos que hay colgados por ahí).
Su historia, de hijo de cultivadores de estiércol a buscacámaras legendario, se parece más a la de Forrest Gump que a la de Indiana Jones. Typhon es un buen tipo al que luchar no se le da muy bien, y para sobrevivir sigue su intuición y se adapta a la situación. No deja que la oscuridad de las empresas rivales, las guerras y las traiciones le amarguen la vida. Es un héroe poco convencional, uno que fracasa, pero sigue levantándose pase lo que pase. Por desgracia, Typhon desapareció hace varias décadas mientras buscaba el planeta natal de los eridianos. O eso pensábamos.
A pasos de gigante
En el juego, no tardamos en descubrir la existencia del explorador legendario Typhon DeLeon tras encontrarnos con un punto histórico (el primero de una serie de registros ECHO que documentan su travesía desde Pandora hasta sus aventuras como el primer buscacámaras). Además de servir como consejo para los nuevos buscadores, los diarios de Typhon cuentan con una gran carga narrativa en los que se habla del mundo del juego y se tratan temas que han despertado la curiosidad de los jugadores desde la primera entrega.
Pandora es un lugar extraño y cruel. A veces, tengo la sensación de que el planeta quiere deshacerse de nosotros, como un skag lleno de garrapatas. Pero les diré una cosa: si consigo encontrar el planeta natal de los eridianos, ¡por fin obtendré respuestas! "Eh, alienígenas", les diré, "¿qué tiene Pandora de especial?".
Para transmitir la idea de que "hay héroes de todos los tipos", Typhon debía tener una voz natural, como si fuese un obrero de Pandora. Parte del encanto de personajes como Forrest Gump es que sobreviven, y hasta perseveran, a pesar de sus limitaciones. En el caso de Typhon, esa limitación es su procedencia pandorana; que a la vez es uno de sus puntos fuertes. Desde sus humildes inicios, Typhon hizo gala de una gran curiosidad e instinto, algo que lo ayudó mucho durante sus aventuras.
A diferencia de héroes más tradicionales, Typhon DeLeon no persigue las cámaras en busca de fama o gloria. Él tiene curiosidad. Es el explorador de exploradores, quiere desenterrar los secretos del universo. Pero como se da cuenta después de encontrar la Vault for Atlas, las corporaciones no comparten sus valores.
Ojalá pudiera decir que encontrar la cámara fue bueno para la gente de Promethea, pero estaría mintiendo. Al principio parecía que sí, todo sea dicho. Atlas empezó a construir túneles y vías planetarias, pero, como no encontraron más cámaras, la corporación dejó de invertir en el planeta y Promethea se volvió a convertir en un vertedero. Tengan cuidado para quién trabajan. Las corporaciones son como los culos: por dentro todas tienen un montón de mierda y, si te quedas cerca de una el tiempo suficiente, te acaban rebozando en ella.
Historia y héroes poco fiables
Aunque Typhon DeLeon no es un narrador muy fiable (como la gran mayoría), en sus diarios se habla mucho de la historia de la franquicia. Cuando escribimos esos registros ECHO intentamos variar entre los que contaban hechos explícitos (Typhon le da a Jakobs su lema característico: "si hiciera falta más de un disparo, no sería una Jakobs") y los que hablaban de temas de la historia de manera abstracta (Typhon preguntándose por qué existen las Cámaras). Ustedes tienen que decidir qué es verdad y qué no es más que un simple cuento.
Al buscar los diarios de Typhon, vamos siguiendo su viaje y, gracias a eso, podemos descubrir cómo era la galaxia décadas atrás. ¿Qué ocurría en Pandora antes de los eventos del primer Borderlands? ¿Cómo obtuvo la corporación Atlas el poder en Promethea? ¿Por qué no descubrió nadie la cámara de Eden-6? Parte del desafío a la hora de escribir los registros ECHO de Typhon era saber que algunos de ustedes no descansarían hasta descubrir toda la historia de Typhon, mientras que otros no se interesarían tanto. Por eso, cada ECHO tiene sentido por sí solo pero también contribuye a toda la historia en su conjunto.
Básicamente, queríamos que Typhon se convirtiera en un héroe a pesar de sí mismo. Se supone que debe ser torpe, pero simpático; un pelín grosero, pero con un corazón de oro; humilde, pero una leyenda. Parte de la gracia del universo de Borderlands es que, a pesar de la oscura sombra que proyectan las malvadas corporaciones, a pesar de la omnipresente avaricia, aún queda algo de bien. No es más que un rayo de esperanza, pero, para muchos, esa esperanza les da fuerzas para no sumirse en la oscuridad del universo. Los buscacámaras quieren encontrar las cámaras no solo por avaricia y egoísmo, sino también para descubrir quiénes son, de qué están hechos y, en última instancia, la razón por la que siguen adelante.
Typhon DeLeon: secretos familiares
Si prestan atención, sus diarios no solo revelan su pasado, sino también algunos de los puntos argumentales más importantes del juego e incluso el verdadero objetivo de los siameses Calypso. Uno de los temas de la historia de Typhon es la propia historia. Como dice él mismo en el juego: "En las manos equivocadas, las historias pueden ser peligrosas". No es mera coincidencia que su carrera por las cámaras contra Tyreen y Troy siga la propia travesía de Typhon. En ocasiones, Lilith y compañía se preguntan cómo es posible que los Calypso y sus Children of the Vault siempre vayan un paso por delante.
Después de derrotar a Troy Calypso, descubrimos que Pandora es en realidad "The Great Vault", una cámara del tamaño de un planeta que alberga un monstruo de un poder inimaginable: The Destroyer. ¿Que qué tiene Pandora de especial, Typhon? Pues naturalmente, los Calypso ya lo sabían desde el principio. Nuestro viaje para evitar que Pandora libere al Destroyer nos lleva al planeta natal de los eridianos, Nekrotafeyo, y, una vez más, seguimos los pasos de Typhon DeLeon.
Cuando llegamos, conocemos al primer buscacámaras en persona. Es... bueno, no tiene un aura tan heroica como en los carteles, pero sigue siendo el buen hombre que hemos ido conociendo. Typhon nos cuenta qué le ocurrió en las décadas posteriores. Según parece, él y Leda se estrellaron en Nekrotafeyo, donde descubrieron información sobre la Máquina y el monstruo de la Cámara que los eridianos encerraron en Pandora. Con el tiempo, tuvieron hijos, hijos especiales. Sirenas siamesas, un chico y una chica, algo que nunca jamás había ocurrido.
Mira, cuando Leda y yo vimos los tatuajes de Troy y Tyreen por primera vez, supimos que debíamos protegerlos. Sirenas. El ser más singular del universo. Y nosotros teníamos a dos de ellos en brazos. La única forma de mantenerlos a salvo era quedarnos aquí. Para siempre. Por un tiempo, fuimos una familia feliz. Pero luego, Leda falleció. Tuve que criar a nuestros hijos solo. Y yo que creía que abrir una Cámara era difícil... ¡Qué equivocado estaba!
Typhon tuvo que criar a sus hijos sin ayuda. Y como sabía lo que harían las empresas si alguna vez llegaban a enterarse de la existencia de Troy y Tyreen (como esclavizarlos, realizar terribles experimentos o cosas muchos peores), decidió que la mejor forma de protegerlos era mantenerlos para siempre en Nekrotafeyo.
El problema es que, aunque Typhon fuera un explorador legendario, no tenía ni idea de cómo criar a dos niños él solo. Y si ya de por sí eso es algo muy complicado, imagínense en un planeta tan peligroso como Nekrotafeyo. Dadas las circunstancias, DeLeon lo hizo lo mejor que pudo, aunque a medida que crecían se volvían más impacientes y empezaban a poner a prueba los límites de su jaula planetaria:
El chico no paraba de enfermar, ¡y mi hija hablaba sin parar! Solo me hacían caso cuando les hablaba de mis aventuras. De los monstruos, de las cámaras, de ser un héroe... ¡No se cansaban nunca! Les conté historias de todo tipo. E incluso les hablé de la Great Vault... Je. ¡Terrible error, sin duda! En las manos equivocadas, las historias pueden ser peligrosas.
Al crear una historia hay que decidir qué contar de manera explícita y qué dejar a la imaginación del espectador. Sabemos que Typhon tenía miedo de lo que le podría pasar a sus hijos si abandonaban Nekrotafeyo. ¿Creía que sus historias serían suficientes para Tyreen y Troy? ¿Por qué no se dio cuenta de que podrían causar el efecto contrario? Queríamos contar la tragedia de un hombre que sobrevivió a duras penas, con un poco de perseverancia y algo de suerte. Pero como el propio Typhon dice: "Fui un explorador de primera, pero un padre de tercera. Si no educas a tus hijos como es debido, ¿qué clase de héroe eres?".
En Nekrotafeyo hay dos registros ECHO ocultos en los que Tyreen y Troy conspiran para abandonar el planeta. En ellos, descubrimos que esas historias le han dado un destino que cumplir a Tyreen. Las sirenas son especiales, y como su habilidad de sirena es absorber la fuerza vital, las cámaras representan la mayor manifestación de sus poderes. Troy, sin embargo, tenía sus dudas. Él no sabía que el plan de Tyreen era abandonar a su padre, pero cuando debe tomar una decisión, se da cuenta de que está vinculado a Tyreen. Sin ella, moriría. ¿Qué otra elección tiene más que quedarse a su lado?
Armados con vastos conocimientos sobre las corporaciones y las cámaras, trazan su plan de dominio. A modo simbólico, adoptan el apellido de su madre: Calypso; y como homenaje a su misteriosa educación, deciden llamar a su secta "The Children of the Vault". Nacieron para ello. Mientras tanto, Typhon se queda atrapado en Nekrotafeyo, obligado a ver en qué se han convertido sus hijos y soportando la carga de que parte de lo que hicieron es culpa suya. Lo que nos lleva a un tema central de la historia: ¿Por qué Typhon nos perdona cuando matamos a Troy? Descubrir que tu hijo murió es un duro golpe, y más lo es conocer a su verdugo. Pero al final, Typhon se vio obligado a ver la verdad sobre sus hijos. No es fácil hacer las paces con eso, pero como él mismo dice, se habían convertido en unos monstruos. "Y los buscacámaras matan monstruos".
Al principio, queda claro que Tyreen es la cabeza pensante y que Troy no es más que un fiel seguidor. Pero las raíces de su maldad se remontan a su nacimiento: unido a su hermana; una sirena solo con tatuajes, sin poderes. Troy está roto y depende por completo de los poderes de su hermana. Y esa dependencia es lo que distorsiona su visión del mundo. Es lo que hace que se una a Tyreen y deje solo a su padre. Después de haberlo abandonado, Typhon seguramente sintió una tristeza que no había sentido desde el fallecimiento de Leda.
Y para cuando lo conocemos en persona, ya se ha visto obligado a asumir la cruda realidad. Eligió contarles historias a sus hijos para protegerlos, pero, en cambio, es posible que haya condenado al universo. Su propia tristeza pasa a un segundo plano, en contraposición al destino del universo. Sabe que si Pandora se abre, su planeta natal quedará hecho trizas. Y que si Tyreen absorbe al Destroyer, será imparable. En parte, lo que hace que Typhon sea un héroe tan peculiar es que no nos carga con el fracaso moral de matar a Troy, sino que él asume la culpa al no haber visto antes que podía ser un monstruo.
Al final, aparece Tyreen para evitar que cerremos The Great Vault. Por un momento, recuerda su infancia y lo que fue crecer como la hija del hombre más famoso de la galaxia, el legendario buscacámaras Typhon DeLeon. Pero su travesía le ha nublado el juicio. El poder y la fama corrompieron sus sueños de la infancia y los convirtieron en algo más oscuro y peligroso. Su sueño de alcanzar las estrellas la ha consumido:
Cuando Troy y yo éramos niños, mirábamos el firmamento y soñábamos con ser unas estrellas. Las más brillantes de la galaxia, como decía Troy. Así que abandonamos este lugar. Nos fuimos a Pandora para convertirnos en buscacámaras. Para abrir la cámara de cámaras y convertirnos en las estrellas más grandes. Nuestros sueños quedaron muy atrás. Un dios aspira a más. Voy a devorar las estrellas del universo una a una, hasta que yo sea la única que brille.
Typhon intenta detener a su hija, pero ahora es tan poderosa que ni él puede hacerlo. Su generación se desvanece; ahora todo está en manos de la nueva. Y, con su último aliento, nos pide que le hagamos una promesa: que los buscacámaras no morirán con nosotros. Pero para pasar la antorcha, antes hay que soltarla.